lunes, 17 de septiembre de 2012

William Blake - la agonía en el jardín

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Otra representación de un episodio del Nuevo Testamento, La Oración del Huerto,ó, como se  denomina esta cuadro, La agonía en el jardín,  que quizá define mejor lo acontecido en esa noche de verdadera angustia para un Hombre que sabía de sobra lo que se le venía encima y era muy libre de seguir adelante ó tirar todo por la borda y vivir. Blake refleja con creces todo el dramatismo del momento y hasta la técnica empleada parece reafirmar la angustia y soledad de la escena. Jesús es un ser extenuado por el miedo y la vacilación que se deja coger por un ángel como si lo volviera a empujar hacia su destino divino.- !amigo, ha llegado la hora de la verdad!. Jesús se entrega en manos de su Padre, en quién , sin duda alguna ,confía.-
La noche se ha vuelto tenebrosa, los árboles son de cristal oscuro y en  los recovecos negros del huerto se vislumbran tres apóstoles qué el pintor desconecta totalmente del diálogo central mediante un profundo sueño, tal y como lo describen los textos sagrados. No se puede hacer mejor, en esta como en muchas otras escenas de la Biblia, Blake da en el clavo.
Respecto a la forma utilizada para pintarla, no es fácil analizar a simple vista como lo hizo,parece ser que empleó una técnica , bastante original, que él mismo denominó témpera, y que consistía en aplicar, sobre una primera base blanca, y una vez dibujado el tema,  el color con acuarelas mezcladas con cola animal y goma. Después pasaba el lapiz o tinta negra para marcar las líneas del dibujo y a continuación aplicaba una capa de cola animal transparente , a modo de esmalte, con lo que protegía las capas inferiores. Esto lo podía hacer sucesivas veces.
Por desgracia , los indices de contracción de los diferentes elementos eran en general muy diferentes, y, con el tiempo , la mayoría de los cuadros así elaborados, se han perdido ó están muy cuarteados y oscurecidos. Muchos se han restaurado, algunos con resultados no del todo satisfactorios
No debió repetirla mucho más, pero se conservan algunas, entre las cuales, afortunadamente, ésta que nos ocupa, hecha sobre chapa de hierro. Blake llamó a estas ilustraciones "frescos", aunque no fueran como los que conocemos como tal ,pero también los llamó "esmaltes" e incluso "piedras preciosas", seguramente por la brillanted de sus numerosos esmaltes, y también por su pequeño tamaño, 27 x 38 cms., dimensiones de la mayoría de los témperas.
La escena ha sido representada en todas las épocas, pero ,para mi gusto, ninguna con tanta expresividad como la de William Blake. Podeis ver algunas en el siguiente enlace :

AGONY IN THE GARDEN










































































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